Creo que a todos los que estamos aquí en este libro nos pasó lo mismo, han sido tantas las cosas que sucedieron y están sucediendo en muestras vidas, que escoger solo una historia de tantas para contar y escribir no es fácil. Respiro profundamente, cierro mis ojos y tomo impulso frente mi computador para escribir lo que sale de lo profundo de mi corazón, lo que marco mi vida para siempre. Solo quiero que con esta historia algunos se identifiquen y sientan que alguien entiende por lo que estás pasando en este momento, que no es el final! Si no un gran comienzo y que hoy te abrazo y te digo: TODO PASARA!!!! Ayer en mi País Colombia, hoy aquí en Estados Unidos en el estado de Wisconsin, sentada en el jardín, con un café en mi mano y con un sol radiante, levanto mi mirada hacia el cielo, para sentir la brisa fresca en mi cara y mi mente una vez más me pregunta que hago aquí? Por qué no estoy allá? Por qué tome esta decisión de dejarlo todo: mi país, mi hija, mi familia, mi comida, mi idioma, mi casa! Sé que aquí en este Pais es todo de colores más brillantes, más ordenado, más seguro y moderno como los cuentos de Disney, una fantasía soñada por muchos que quisieran estar en mi lugar…….pero aterrizo en la realidad y recuerdo cuando tome esta gran decisión de venir aquí, esto fue hace algunos años, ese día mi vida se partió en dos, donde tuve que decir: ya no puedo más con esta carga! y en un abrir y cerrar de ojos todo se derrumbó en un segundo, sintiendo que caigo a el abismo más profundo del fracaso y sin saber cómo salir, ni ver una luz de esperanza para mí. Mis malas decisiones del pasado me llevaron a una situación desesperada en ese momento de mi vida, en donde perdí lo que había construido por más 25 años, una reputación, una imagen, un hogar, una familia, no solo era lo material, lo más triste fueron las consecuencias que terminaron afectando a las personas que amaba y por esto nos vimos obligadas a separarnos y tomar caminos diferentes. En ese momento sentí tanta frustración, veía de frente mi vida mirándome a los ojos y diciéndome: que vas hacer? Cual va ser tu futuro? mírate! ya no eres joven, ni tan vital como antes y recuerda estás sola! En este momento me derrumbe en un llanto en donde gemía de dolor, mi corazón estaba destrozado, mi mente daba vueltas y vueltas pensando que camino tomaría de ahora en adelante. Fueron días muy difíciles en donde me visitaron los fantasmas de mi mente haciéndome pasar momentos de tristeza, de soledad, de impotencia, de angustia, la culpa, de vergüenza, de miedo a lo desconocido y llegar a sentir un dolor inmenso a soltar! a desprenderme de lo que ya no tengo, de lo que ya no está, porque simplemente ya no existe la vida que tenía. En esos momentos me sentía tan perdida; como cuando una niña se suelta de la mano de su mama y no la encuentra. Yo me perdí a mi misma!!!! Por mucho tiempo no vi más a esa mujer fuerte y empoderada que admiraba, por lo que era y la vida que tenía, por su forma de pensar y hacer las cosas, por lo que había logrado y los sueños que había cumplido en su vida profesional y personal. Fueron meses muy difíciles de llevar y una vez más la vida me mostraba que Definitivamente somos el resultado de nuestras decisiones. Sin embargo en esos momentos en donde me encontraba tan vulnerable y donde a diario me recordaba que lo había perdido todo, mire al cielo para encontrar un rayito de luz y esperanza y fue donde encontré las fuerzas para no darme por vencida, encontrar mi nuevo propósito de vida y salir del hueco donde me encontraba. Porque déjame decirte algo!! En toda situación, prueba, problema, obstáculo en tu vida existen dos caminos para escoger, 1. Seguir viviendo la vida en el pasado culpándote, con resentimiento y dolor de lo que pudo ser y no fue. o 2. Renacer desde el amor, el perdón y la resiliencia, dándote la oportunidad de empezar de nuevo. y ¨ YO¨ decidí elegir la segunda. Hoy agradezco a Dios, mi hija, mis padres y mi familia que siempre has sido un gran apoyo en este proceso. Hoy con humildad reconozco el aprendizaje que todo esto ha dejado en mi vida. Renací de nuevo de las cenizas como el ave fénix, de cero! Aceptando los nuevos comienzos, con mente abierta, enfocándome en nuevas metas y sueños, dándome la oportunidad de ver la vida de muchos colores, en donde volví a sonreír, a recuperar mi autoestima, mi amor propio y a perder el temor a arriesgarme y a tomar esta vez buenas decisiones. Es por esto que estoy aquí en Estados Unidos , el cual quiero y agradezco, por ser un Pais próspero y lleno de puertas abiertas a las oportunidades, que nos abraza a todos, aquí he conocido personas maravillosas y empáticas que me han dado la mano y ayudado. Sé que estoy lejos de las personas que amo y las raíces que me vieron nacer, pero sé que algún día regresare a abrazarlos y regresare victoriosa, con la frete en alto, con mis sueños cumplidos y diré valió la pena estar aquí! Por eso hoy te digo por más dura que sea la prueba o situación en tu vida, aprende de ella, agradece y no pierdas nunca la fe y la esperanza, que todo pasara y estará bien amigo(a) mío!

Hearing Sandy’s story inspired this song about never giving up hope and following your heart. Like Sandy, the energy is positive and upbeat while also dealing with some of life’s toughest challenges under the surface. Our biggest hope of the project tis to give Sandy something to celebrate incredible redemption story. We are incredibly honored to be a small part of her journey.

Much like Bob Dylan and Jon Prine and more current contemporaries such as The Avett Brothers and The Lumineers, Milwaukee, WI-based band Listening Party is indebted to the traditions of folk, rock and Americana and taking those styles to new horizons. At the heart of their sound, storytelling and melody reign supreme, with songs seeking to examine stories rooted in the joys and perils of life. Their folk and Americana-steeped sound expertly and reverently takes the pulse and traditions of their genre while adding their own charm.